Boca logró regresar de Belo Horizonte, pero la novela de terror que se originó en Brasil todavía tiene algunos capítulos más. Ahora, la delegación xeneize deberá respetar el aislamiento obligatorio dispuesto por el Ministerio de Salud argentino y tendrá que permanecer en un hotel para cumplir el protocolo indicado.
Daniel Scioli, embador de la República Argentina en tierras brasileñas, había manifestado que la burbuja sanitaria boquense no se había roto pero Carla Vizzotti, Minstra de Salud, se paró en la vereda opuesta y dejó en claro que no habrá ninguna excepción hacia el grupo de futbolistas, dirigentes y cuerpo técnico.
De esta manera, el Xeneize pierde a casi todos sus jugadores profesionales para los próximos dos encuentros del torneo local: el sábado visita a Banfield, mientras que el martes recibe a San Lorenzo en la Bombonera. Hasta el momento, los partidos no fueron suspendidos y todo indica que se jugarán con normalidad.
¿Y si en la Ribera no juntan 11? En caso de que esto suceda, Boca perderá los puntos y sumará apenas una unidad de nueve en juego. Panorama complicado para el equipo de Sebastián Battaglia, quien asumirá como DT interino para reemplazar a Miguel Russo, otro de los aislados.