En una hermosa tarde primaveral, Boca Juniors siguió demostrando un flojo momento. Tal vez el peor desde que asumió la actual dirigencia comandada por Juan Román Riquelme.
En la última versión del Superclásico, River Plate con un montón de suplentes en gran parte del partido pudo ganarle al Xeneize por 1 a 0 en el marcador.
El resultado es bastante impactante y determinante. Si, este año Diego Martínez fracasó en el cumplimiento de los objetivos más importantes del año. En la Sudamericana quedó eliminado, en la Copa Argentina avanzó ante Talleres a las cuartos de final con un polémico arbitraje y en la Liga Profesional está cada vez más lejos del puntero, Vélez Sarsfield.
En un principio, todos los que nos dedicamos a la cobertura de partidos de la Primera División del fútbol argentino nos sorprendimos con la llegada de Martínez. Su impronta fue notoria y durante los primeros meses de 2024 el Azul y Oro mostró una cara diferente a su predecesor, Jorge Almirón.
Había protagonismo, jugadores enchufados y una idea agradable en el fútbol del equipo que milita en Brandsen 805. Pero, la dicha no duró mucho. Estudiantes de La Plata dio el primer aviso ante un Gigolo que prefería poner lo mejor en la Copa de la Liga en lugar de la Sudamericana.
La historia en el torneo continental no fue la esperada teniendo en cuenta el grupo en el que quedó ubicado. Terminó la fase de grupos clasificado en la segunda posición con algunas dudas. Esta situación lo condujo a verse con Independiente del Valle y luego Cruzeiro, equipo que le aplazó la ilusión de conseguir un título internacional.
El panorama desde ese momento comenzó a complicarse y muchas veces este servidor le hizo algunas advertencias al DT del equipo. Martínez logró un triunfo urgente en el torneo más federal del país, pero en la Liga Profesional la historia siguió en descenso.
Racing y River le dieron un golpe durísimo al técnico del Xeneize, quien deberá comenzar a redactar su carta de salida del club. El argumento a esta posición tal vez estaría relacionado con la consecución de resultados y si somos bastante coherentes, este año Boca no pudo alcanzar festejos representativos.