Los socorristas hallaron los restos de cuatro personas más mientras los esfuerzos de rescate en el edificio residencial derrumbado en Florida enfrentaban nuevas amenazas del clima el martes a medida que la tormenta tropical Elsa empieza azotar partes del estado.
Se pronosticaban lluvias intensas en Surfside, donde se encuentra el edificio colapsado, a medida que Elsa se fortalecía el martes y posiblemente volverá a ser un huracán antes de tocar tierra entre la bahía de Tampa y el tramo de costa Big Bend y cruzar el norte del estado. Las cuadrillas pueden trabajar bajo la lluvia, pero tormentas eléctricas aisladas los han obligado a suspender el trabajo de a ratos, y un estacionamiento en medio de los escombros se ha inundado.
Las demoras han descorazonado a los rescatistas, dijo la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava.
“En verdad, viven para salvar vidas y han continuado a pesar de todos los obstáculos’', dijo en una conferencia de prensa.
Con todo, las cuadrillas tuvieron un gran impulso con la demolición total del edificio Champlain Towers South el domingo. Así pudieron llegar a lugares hasta entonces inaccesibles, como los dormitorios donde se cree que había gente a la hora del siniestro, dijeron las autoridades.
Hasta ahora hay 32 muertos confirmados y se desconoce el paradero de al menos 113 personas.
“El sitio estás activo desde que comenzamos, ahora que se ha demolido el edificio dañado’', dijo el alcalde de Surfside, Charles Burkett, y añadió que el equipo pesado podía desplazarse libremente por el lugar.
Los socorristas esperaban tener una imagen más clara de los huecos que pudieran existir entre los escombros a medida que buscaban a personas aún atrapadas en el ala derruida, pero hallaron muy pocos huecos, dijo subjefe de bomberos de Miami-Dade, Raide Jadallah, a los familiares el lunes.
No se ha rescatado a nadie con vida después de las primeras horas después del derrumbe del 24 de junio, pero los socorristas aún tienen esperanzas.
“Seguimos concentrados en nuestra misión principal, de no dejar piedra sobre piedra y encontrar a todas las personas que podamos y dar algunas respuestas a la familia y los seres queridos o darles algún consuelo’', dijo el capitán de bomberos de la ciudad de Miami, Ignatius Carroll.