La necesidad de renegociar la deuda, la coordinación entre el sector público y privado y un "programa consistente" para combatir la inflación, se posicionan como los principales desafíos a afrontar por el Gobierno entrante de Alberto Fernández, según economistas de diversas vertientes académicas.
En diálogo con NA, el economista jefe de la consultora Elypsis, Martín Kalos, apuntó a la necesidad de lograr una renegociación de la deuda y destacó la importancia de contar con "coordinación entre el sector público y privado".
"Las urgencias económicas, laborales y productivas están a la vista. Hay un agravamiento de una situación muy crítica a nivel social que se traduce en indicadores que seguimos con preocupación como la pobreza, la indigencia, la precarización laboral", analizó.
Puntualizó que "es importante pensar en dar una solución de largo plazo a esas cuestiones tan críticas".
Al insistir con la renegociación de la deuda, advirtió: "Hoy por hoy, la perspectiva es de una incapacidad de pago en el corto plazo".
"Si no logra una renegociación, le va a costar tener recursos disponibles para ejecutar políticas públicas como para que el conjunto de la economía tenga los necesario para crecer", pronosticó y señaló que "en paralelo, hace falta empezar a diseñar políticas públicas de largo plazo, en particular en lo productivo".
Por su parte, el director del Centro de Política Económica Argentina, Hernán Letcher, sostuvo que los principales desafíos para el Gobierno entrante se vinculan con "la recuperación del poder adquisitivo y una renegociación exitosa de la deuda".
Al asegurar que ambas cuestiones están relacionadas, indicó: "La pérdida acumulada de poder adquisitivo en cuatro años es de aproximadamente 20 por ciento. Eso tiene muchos efectos. La gente vive peor, se reclama menos e implica un efecto macroeconómico, que es el impacto sobre la evolución del Producto Bruto Interno dado que el 65 por ciento lo explica el consumo".
"Están vinculadas porque la renegociación puede permitir liberar recursos, como dar un aumento de jubilaciones, por ejemplo. Permitiría margen de acción para apuntalar el consumo", argumentó y afirmó que se debe "pensar la deuda con relación al PBI".
Para el economista Agustín Monteverde, "en lo inmediato está el tema de la renegociación con los acreedores".
"No hay ninguna duda", enfatizó en declaraciones a Noticias Argentinas y criticó que "se desperdiciaron muchas semanas sin equipo económico". En ese sentido, pronosticó: "Creo que vamos hacia una cesación de pagos como mínimo".
Alertó también sobre el "shock inflacionario" y evaluó: "La Argentina enfrenta un problema fiscal al que nunca quiere atender. El gran desafío de fondo que enfrenta la administración es devolverle sentido a las cuentas públicas".
"Los ingresos están por encima del máximo tolerable", enfatizó, mientras pidió "reducir el gasto, pero bajando los impuestos para devolverle vitalidad a la actividad económica".
Por último, el economista y docente de la UBA y la Universidad Torcuato Di Tella, Bernardo Kosacoff, recomendó poner en marcha un "programa consistente y articulado" para "apuntar a disminuir la inflación".
Sugirió tener un "proceso asociado a estrategias de desarrollo" en un contexto de caída de empleo e inversión.
De acuerdo con su criterio, la Argentina debe tener una "agenda importante de un régimen de cooperación y coordinación" entre diferentes sectores, incluso empresarios, sindicalistas y sociedad civil.
Resaltó que la próxima administración tendrá que buscar la manera de "recuperar la actividad" y "revertir la desigualdad y la pobreza".