Una mujer de Melbourne, Estados Unidos, que viajó a Tailandia para casararse, en busca de una experiencia exótica, se pegó un buen susto cuando un elefante local trató de ¨comérsela¨.
Es que la mujer se acercó al elefante para tocarlo y, antes de darse cuenta, el animal había enrollado su trompa alrededor del cuello de la novia y trataba de metérsela en la boca, ante las risas de los presentes.
Si bien el dueño asegura que éstas reacciones son típicas en los elefantes, y que lo hacen para jugar, la novia quedó un poco alterada. Por suerte, la situación duró unos pocos segundos, y no dejó más daños que un fuerte aroma a aliento de elefante en el pelo de la mujer.