El gobierno de Estados Unidos lleva siendo acusado desde hace muchas décadas de ocultar evidencias sobre la existencia de vida extraterrestre, pero un nuevo informe ha revelado que Washington nunca ha recuperado o hallado restos de vida o tecnología con origen en otros planetas.
Un informe muy esperado del Departamento de Defensa que ha revisado documentos clasificados que datan de entre 1945 y 2023 fue entregado en el Congreso de Estados Unidos el pasado 8 de marzo de 2024, según Live Science, y los resultados de la investigación han sido seguramente bastante decepcionantes para cualquier persona creyente de las conspiraciones alienígenas.
La mayor revelación del informe es que el gobierno de Estados Unidos nunca ha ocultado cuerpos o naves alienígenas. Aunque sí es cierto que Washington contaba en la década de 2010 con un programa de ingeniería reversible para tecnología alienígena en el caso de que alguna vez se hallara dicha tecnología.
Más relevante aún es el hecho de que la investigación no haya hallado ninguna prueba de que Estados Unidos haya encontrado vida extraterrestre u ocultado la existencia de los alienígenas. Pero estas no han sido las únicas conclusiones a las que llegó el informe.
Se ha determinado que los objetos voladores no identificados, conocidos como OVNIS, y más conocidos por el gobierno estadounidense como fenómenos aéreos no identificados, FANI, que fueron vistos en la década de los 60, eran prototipos de aviones espías o aeronaves.
Además, el informe concluye que ninguno de los avistamientos FANI fue el resultado de la tecnología extraterrestre y podían ser catalogados simplemente como "objetos y fenómenos ordinarios erróneamente identificados".
La investigación también explica que muchos de los avistamientos sin resolver o no identificados podrían acabar siendo "resueltos como objetos o fenómenos ordinarios" si los equipos de investigación tuvieran a su disposición más y mejores datos sobre estos incidentes.
"La inmensa mayoría de los testimonios son casi seguro el resultado de una identificación errónea [de los objetos] y una consecuencia directa de la falta de conocimiento sobre el tema", se podía leer en el informe, en el que se añadía también que la falta de datos de los casos estaba vinculada a la incapacidad de resolución de los mismos.
El informe fue elaborado por la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (conocida por sus siglas en inglés como AARO) del Pentágono, que revisó documentos clasificados y desclasificados, realizó decenas de entrevistas, analizó supuestos materiales alienígenas, e investigó los avistamientos OVNIS.
Uno de los aspectos más interesantes del informe de AARO fue la investigación que se llevó a cabo sobre diversas afirmaciones que sostenían desde la existencia de empresas privadas que supuestamente se encargaban de hacer ingeniería reversible sobre tecnologías extraterrestres, hasta las afirmaciones de que un oficial militar había tocado una nave espacial extraterrestre.
El informe de AARO también abordó la creencia popular de que el gobierno, o un grupo secreto operando desde dentro, había recuperado naves de otro planeta y restos biológicos de alienígenas y que intentaban mantenerlo en secreto desde los años 40.
"AARO reconoce que muchas personas sinceramente mantienen estas creencias", explicaban, añadiendo que su objetivo no era desmentir estas creencias, sino usar "un enfoque científico y analítico riguroso para investigar los trabajos de investigación de avistamientos FANI".
Sin embargo, el informe de AARO ha dejado claro que no hay "ninguna evidencia comprobable sobre las afirmaciones que sostienen que el gobierno de EE. UU. y empresas privadas hayan tenido acceso o dispongan de ingeniería reversible de tecnología extraterrestre", según las declaraciones del secretario de Prensa del Pentágono, Pat Ryder. El informe es solo el primer volumen de la investigación, pero abarca toda la información adquirida hasta noviembre de 2023. Se publicará un segundo volumen que examinará toda la información recibida después de noviembre de 2023, en el que se incluirá nuevos datos sobre el personal antiguo y actual del gobierno.
Popular Mechanics destacó que existía una versión clasificada del informe de AARO, pero señaló que era poco probable que contuviera información diferente o nueva de la versión desclasificada. La diferencia entre los documentos posiblemente persiga proteger la revelación de programas secretos e información sensible sobre las personas involucradas en ellos, según explicaba la revista.
Estados Unidos ha pasado décadas "desviando, desmintiendo y desacreditando" testimonios sobre OVNIS y otros fenómenos desde los años 40, según señalaba Reuters. Quizás es el momento de que los ciudadanos se crean las conclusiones extraídas por el gobierno de Estados Unidos sobre dicha cuestión.