Meghan Markle se convirtió en una de las figuras más polémicas de la monarquía británica. La duquesa de Sussex perdió el contrato de millones de dólares con grandes empresas y se encuentra en apuros para poder mantener su patrimonio. La actriz estaría buscando regresar a las pantallas, lo que podría significar el fin de su título nobiliario y su matrimonio.
Hace varias semanas se conoció la noticia de que Spotify decidió no renovar el contrato con la duquesa de Sussex para una segunda temporada de su podcast Archetypes. Incluso, uno de los ejecutivos más importantes de la empresa acusó al matrimonio real de estafadores ya que, aparentemente, Meghan no era quien hacía las entrevistas y solo editaba su voz.
Esta decisión fue una bomba para los duques de Sussex, quienes esperaban el pago millonario que habían pactado, pero que no obtuvieron por completo por los desacuerdos de la empresa musical con su comportamiento. Actualmente, el matrimonio se encuentra en búsqueda de nuevos proyectos para generar ingresos.
Según la revista Vanitatis, un medio de comunicación británico asegura que la exactriz quiere retomar su profesión y podría llegar a aparecer en una película romántica con un desenlace cliché que ya conocemos. Esto se debe a los rumores que aseguran que Netflix solo quiere trabajar con el príncipe Harry, ya que no encuentran relevante la participación de Meghan.
Como si fuera poco, en medio de todos estos problemas laborales y económicos, parece que el matrimonio se encuentra en una crisis que los podría llevar al divorcio. Según las especulaciones de los fanáticos, el rey Carlos III estaría persuadiendo al duque de Sussex para que deje a Meghan y recupere los privilegios de su familia.
Por el momento, ni Harry de Sussex ni Meghan Markle se pronunciaron para hacerle frente a estos rumores que perjudican su reputación. Pero el hecho de que la duquesa quiera regresar a las pantallas podrías costarle su puesto en la realeza, ya que por norma protocolar no puede trabajar en la TV.