El primer ministro de Hungría, el ultranacionalista Viktor Orbán, vaticinó el sábado que Ucrania no ganará la guerra contra Rusia, y que no se logrará la paz hasta pasadas las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, en 2024.
"Ucrania nunca ganará contra Rusia", dijo Orbán en la localidad rumana de Baile Tusnad, en un acto organizado por la minoría húngara de Rumanía.
"Nunca habrá negociaciones de paz ruso-ucranias", ya que Moscú quiere garantías de seguridad, añadió.
El mandatario magiar, considerado el mejor aliado del presidente ruso, Vladímir Putin, en la UE, aseguró que Moscú únicamente negociaría con Washington, algo que dio a entender no sería posible con el actual jefe de la Casa Blanca, el demócrata Joe Biden.
"La primera verdadera posibilidad de la paz en Ucrania se dará en 2024, cuando en Estados Unidos se realizarán elecciones presidenciales", sentenció el líder ultraconservador, dando a entender que los demócratas perderían esos comicios.
Orbán se mostró convencido de que el ejército ruso no hubiese invadido Ucrania si el poder de Estados Unidos y Alemania hubiese estado todavía en manos del expresidente Donald Trump y de la excanciller Angela Merkel, respectivamente.
"Si en el momento crítico Trump hubiese sido el presidente de los Estados Unidos y Angela Merkel la canciller de Alemania, ahora no habría guerra en Ucrania", declaró.
Explicó que esa visión suya se basa en su firme creencia de que ambos exmandatarios hubiesen accedido a "ciertas exigencias" del Kremlin.