El gigante tecnológico estadounidense Apple fletó discretamente seis vuelos de carga para transportar 600 toneladas de iPhones desde la India a Estados Unidos a finales de marzo, según informó Reuters citando fuentes anónimas.
Los aviones de carga tenían una capacidad de 100 toneladas cada uno. Según el informe, el objetivo era "adelantarse" a los aranceles que iba a imponer el presidente estadounidense, Donald Trump. Según los cálculos del medio, los aviones transportaron un total de 1,5 millones de iPhones.
Apple también negoció un llamado "corredor verde" para acelerar el despacho de aduanas en el aeropuerto de Chennai, reduciendo el proceso de 30 horas de duración a seis horas. Se trata de una práctica que, al parecer, siguen regularmente en China, donde Apple fabrica gran parte de sus productos. Apple está aumentando sus existencias en EE.UU. para reducir los efectos de los aranceles sobre sus propias importaciones procedentes de India y China.
Apple planea enviar más iPhones de India a EE.UU. para compensar el alto coste de los aranceles a China, según informó el lunes el 'Wall Street Journal'. El año pasado, la empresa exportó más de 17.000 millones de dólares (15.000 millones de euros) en iPhones desde el país del sur de Asia. La producción en India podría cubrir potencialmente la mitad del mercado estadounidense de iPhones.
Mientras tanto, China, tradicional centro de fabricación de la empresa, está inmersa en una guerra comercial con Estados Unidos. La segunda economía más grande del mundo anunció el viernes que está ajustando sus aranceles sobre los productos estadounidenses del 84% al 125% a partir del 12 de abril, una respuesta al arancel del 145% de la administración Trump sobre las importaciones procedentes de China.
Mientras tanto, India se enfrentaba a un arancel del 26% sobre sus exportaciones a EE.UU. antes de que entrara en vigor esta semana una pausa de 90 días sobre los llamados aranceles "recíprocos" a determinados países. Actualmente, los productos importados de la India están sujetos a un arancel del 10% en las aduanas estadounidenses.
¿Un iPhone por 3.000 dólares?
Dado que la cadena de suministro de Apple se basa en gran medida en China, crece el temor a que aumenten sustancialmente los precios de los iPhones, así como de otros productos tecnológicos de uso cotidiano, como portátiles y auriculares, muchos de los cuales se fabrican en el país asiático.
Apple fabrica la mayoría de sus iPhones desde que el primer modelo salió al mercado hace 18 años en China, un país con el que EE.UU. está a punto de congelar el comercio, dado que ambas partes se imponen aranceles de más del 125% sobre las importaciones de la otra.
Que el gigante tecnológico cambie sus prácticas de décadas y traslade su cadena de suministro fuera de China, podría llevar varios años y costar miles de millones de dólares, según los expertos.
El analista de Wedbush Securities, Dan Ives, afirmó que "el concepto de fabricar iPhones en EE.UU. no es viable", una opinión muy extendida en la comunidad inversora. Calcula que el precio actual de 1.000 dólares de un iPhone fabricado en China o India se dispararía a más de 3.000 dólares (2.647 euros) si la producción se trasladara a Estados Unidos. Tampoco está claro si el gigante tecnológico estaría dispuesto a hacer esta inversión mientras las políticas comerciales evolucionan rápidamente.
Apple aún no ha discutido públicamente su respuesta a los aranceles de Trump sobre China, pero el tema podría surgir el 1 de mayo, cuando el consejero delegado de Apple, Tim Cook, tiene previsto responder a las preguntas de los analistas durante una conferencia telefónica trimestral para discutir los resultados financieros y la estrategia de la compañía.
El precio de las acciones de Apple ha caído un 15% y ha reducido el valor de mercado de la compañía en 500.000 millones de dólares (442.000 millones de euros) desde que Trump aumentó los aranceles el 2 de abril. 'Euronews' se ha puesto en contacto con el equipo de prensa de Apple para obtener más comentarios sobre el envío de carga de la India a Estados Unidos.
Las últimas medidas de Trump quitan los aranceles para dispositivos electrónicos como móviles, ordenadores o celdas solares, entre otros, incluso si llegan de China, por lo que no es necesario que Apple siga haciendo este tipo de logística.