Hoy, 22 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Tartamudez o Disfemia, una jornada que pretende recordar a la sociedad que existe ayuda para tratar este problema y que se debe normalizar la fecha fue promovida por la Asociación Internacional de Tartamudos (ISAD).
Desde 1998 se toma al 22 de octubre como fecha para concientizar a la sociedad y así visibilizar la problemática que padecen algunas personas. Además este día tiene como objetivo puntual eliminar toda clase de discriminación social y promover oportunidades a las personas que padecen este trastorno.
La disfemia o tartamudez es un trastorno de la comunicación que se caracteriza por interrupciones involuntarias del habla que se acompañan de tensión muscular en cara y cuello, miedo y estrés.
Este trastorno esta muy estigmatizado, ya que continuamente se cuestiona la inteligencia y habilidad emocional de la persona que tartamudea, creyendo que con «calmarse» o «concentrarse más en lo que se dice» se logrará hablar de forma fluida.
Para el tratamiento de tartamudeo existen aplicaciones móviles y programas para las computadoras que contibuyen mediante ejercicios a la comunicación.
El objetivo principal de estas aplicaciones consiste en recuperar el círculo articulatorio digo –>oigo –> construyó frase –> digo, etc. utilizando diferentes métodos de tratamiento de tartamudeo.
Lewis Carroll, autor de Alicia en el País de las Maravilllas no pudo acceder al sacerdocio por su tartamudez. Como respuesta ante la negativa de la Iglesia escribió el siguiente poema:
«Aprende bien tu gramática / Y nunca tartamudees / Escribe bien y con prolijidad / Y canta suave y dulcemente / Bebe té, no café; Nunca comas toffy / Come pan con mantequilla / Una vez más no tartamudees».