La NASA, reconocida por sus exploraciones en el espacio, también despliega su experiencia en la investigación terrestre para comprender mejor uno de los desafíos más urgentes que enfrenta nuestro planeta: el cambio climático.
A través de una red global de satélites y tecnología de vanguardia, la agencia espacial estadounidense investiga minuciosamente cómo este fenómeno está impactando las temperaturas en diferentes regiones del mundo.
Sus descubrimientos no pasaron por desapercibidos, puesto que revelaron cómo ciertas regiones del planeta podrían enfrentar condiciones climáticas extremas y volverse inhabitables en tan solo unas décadas. A continuación, todos los detalles.
Con los datos recabados por satélites y estaciones meteorológicas, la NASA empleó un índice térmico especial, conocido como bulbo húmedo, para proyectar cómo el cambio climático afectaría la capacidad de supervivencia de las personas en diversas regiones del globo.
Se trata de un termómetro especial que mide la humedad relativa del aire, lo que es útil para entender el clima y predecir cambios en él. Además, proporciona una evaluación efectiva del riesgo de malestar por calor y sus impactos en la salud humana en comparación con otros índices térmicos.
De acuerdo a los expertos, un índice de bulbo húmedo que excede los 35 °C durante largos períodos representa un riesgo significativo para la vida humana. En áreas donde este índice es común, el riesgo de muerte relacionado con el calor se vuelve cada vez más pronunciado.
Regiones como el sur de Asia, el Golfo Pérsico y los países costeros del Mar Rojo podrían experimentar índices de calor peligroso para el año 2050, según la NASA. Por otro lado, se proyecta que la región este de China y ciertas áreas de Brasil podrían volverse difíciles de habitar para el año 2070.