Nuestras madres, desde que nacemos, son nuestras cuidadoras, y por ello se crea un vínculo especial de apego entre ellas y nosotros que dura toda la vida. A medida que crecemos, siempre están allí de forma incondicional, y siempre buscan que seamos felices, incluso si tienen que sacrificar su vida para que lo seamos. Ellas son las personas más especiales en nuestra vida.
Por eso, este artículo va dedicado a ellas.
Una gran frase para todas las madres que demuestra el auténtico amor madre-hijo. "Nunca te agradecí lo suficiente por guiarme en la dirección correcta. Nunca te agradecí lo suficiente por escucharme. Nunca te agradecí lo suficiente por protegerme de las cosas que no debería haber hecho.Nunca te agradecí lo suficiente por aguantar mis cambios de humor y arrogancia. Nunca te agradecí lo suficiente por estar para mi sin dudarlo. Nunca te dije lo suficiente cuánto te quiero. Significas el mundo para mi, pero no te lo digo lo suficiente. No importa lo que ocurra, siempre te amaré mamá, no importa lo que discutamos, o cuanto te enojes conmigo, te amaré hasta el día en que muera".