El Banco de la Nación Argentina (BNA) anunció la decisión de ofrecer nuevamente al sector agrícola la opción de inversión en depósitos a plazos fijos en pesos atados a la variación de la cotización del dólar.
La propuesta está orientada a ampliar la oferta de servicios financieros para personas y empresas que realizan actividades productivas relacionadas con el agro, precisó el BNA en un comunicado.
Para esta herramienta de inversión a plazo con retribución variable, la tasa de interés sobre el capital invertido se calculará en función de la variación en la cotización del dólar de dos días hábiles previos a la fecha de imposición hasta dos días hábiles previos al vencimiento, explicó el banco estatal. En este sentido, se aclaró que "si la variación resultase negativa, se aplicará tasa cero".
El capital a invertir es en pesos, atado al dólar, y el plazo de colocación cuenta con un mínimo de 60 días y máximo de hasta 370 días, por un monto mínimo de $ 1.500 y un máximo de $ 500.000.000, lo que no podrá superar el doble de las ventas totales del titular del depósito, en cereales u oleaginosas, registradas a partir del 1º de noviembre de 2019.
Más opciones de inversión
Este instrumento financiero permitirá profundizar los beneficios para los inversores del agro, uno de los principales sectores del país en la generación de ingresos de divisas.
Hoy, los plazos fijos en pesos empezarán a pagar un poco más. En una carrera contra la suba de los precios, que este año viene marcando cifras que no se observaban desde la salida de la hiperinflación en 1991, el Banco Central (BCRA) subió las tasas de interés por sexta ocasión en el año.
La decisión viene en línea con los objetivos pactados dentro del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de alcanzar tasas reales positivas. Es decir, que el ahorrista pueda ganarle a la inflación. Así, la entidad que conduce Miguel Ángel Pesce incrementó cinco puntos porcentuales la tasa nominal anual para los plazos fijos minoristas a 30 días de un 48% hasta el nuevo piso de 53% anual. Es una tasa efectiva anual (TEA) de casi un 68%.
Pero, ¿le gana a la inflación? Algunas respuestas se pueden encontrar al observar la tasa mensual de estas colocaciones, ya que las mismas avanzaron de un 4% a un 4,4%. En comparación, en mayo la inflación fue del 5,1%; en abril, del 6%; en marzo, del 6,7%; en febrero, 4,7%; y en enero, 3,9%. En definitiva: desde que empezó el año, solo hubo un mes en el cual los precios avanzaron por debajo de la cifra actual (y por 0,5 puntos).
De acuerdo con el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), informe que elabora el Banco Central, la repuesta para el corto plazo es no. Según el último informe, los economistas prevén una inflación del 5% en junio y del 4,5% para julio. En otras palabras, los plazos fijos continuarían perdiendo contra el alza de precios, por lo menos en el próximo par de meses.