El objetivo del presente artículo es caracterizar las políticas económicas del gobierno nacional, identificar quienes son los ganadores y perdedores del plan económico y establecer las consistencias (si es que las hubiera) del mismo
l ¿Quiénes son los que festejan el "atraso" argentino?
El ministro Caputo ha afirmado hace algunos días que el tipo de cambio del dólar no se encuentra atrasado, sino que algunos precios de la economía se encuentran adelantados. Por otro lado, ha confirmado que un eventual acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (F.M.I) no implica una salida de las restricciones cambiarias en el corto plazo. Estos dichos han generado una serie de debates en materia de economía política, sobre todo a lo que refiere al modo de acumulación que coloca en el centro al capital financiero.
En primer lugar, se va a explicar el esquema cambiario que ha establecido el gobierno. El crawling peg establece depreciaciones periódicas y preestablecidas del tipo de cambio realizadas por el Banco Central (BCRA). Durante el 2024 (posterior a la devaluación del 118% de diciembre del 2023) el crawling peg fue en torno al 2%; sin embargo, en los últimos días el gobierno nacional anunció una reducción del 2% al 1%. A esto se suma otro elemento, el dólar blend, el cual permite a los exportadores liquidar una proporción de las divisas en la cotización del “contado con liqui”. Otro aspecto ha remarcar es el control del mercado de capitales (cepo) que el gobierno ha mantenido deliberadamente a pesar de las promesas electorales. Lo que ha ocurrido es que el gobierno ha “atrasado” las cotizaciones del dólar a fuerza de intervención en el mercado de divisas lo que ha generado caídas en las reservas internacionales. El atraso cambiario no es más que mantener un dólar barato, el cual tiene impacto directo en los precios internos de la economía. Este atrasado cambiario no se encuentra en discusión, más aún si se acude a las estadísticas (ya sea que el tipo de cambio se mida en función del PBI y/o precios internos).
En segundo lugar, hay que explicar que el gobierno ha garantizado la rentabilidad financiera vía carrytrade (o bicicleta financiera para no ahondar en eufemismos). Es decir, que al controlar el tipo de cambio y teniendo tasas de intereses por encima del crawling peg, la rentabilidad de la bicicleta financiera ha sido garantizada. Esto se ha logrado gracias al ingreso de dólares financieros que buscan este tipo de valorización. Es propio de las etapas de valorización financiera el incremento de deuda externa para mantener esta bicicleta financiera, lo que condena a los siguientes períodos a padecer inflación, restricción externa y una extranjerización de la economía cada vez más profunda. En este sentido, el Gobierno hoy en día se encarga de instalar que se encuentra cerca de acordar un préstamo de 11 mil millones de dólares con el F.M.I, lo que supuestamente sería algo “beneficioso” para el país y que sería el resultado de que supuestamente se “están haciendo bien las cosas” (el/la lector/a sabrá identificar el sarcasmo de la oración).
Respecto a la inflación el gobierno ha intentado instalar que se ha estabilizado (otro eufemismo). En primer lugar, es conocido el debate en torno a los ponderadores utilizados para medir el índice de precios al consumidor ya que hace que el resultado final subestime incrementos en sectores importantes de la economía. En segundo lugar, este gobierno autopercibido libertario es el que más ha controlado los precios dela economía ya que preestablece el tipo de cambio (como se explicó anteriormente), los niveles de tasa de interés, controla los salarios (esto lo hace al ajustar salarios y al no homologar paritarias que hasta han sido acuerdos entre privados) y las jubilaciones. En tercer lugar, ha quedado demostrado que la inflación no es un fenómeno estrictamente monetario, sino que en el caso de Argentina es estructural y se encuentra fuertemente vinculado al sector externo, entre otras variables. Es por esto por lo que se ha mantenido el cepo al dólar; pero no exclusivamente para frenar a la inflación (con fines electorales) sino para garantizar las tasas de ganancias del carrytrade (como se explicó anteriormente).
Todo esto genera ganadores y perdedores. En el grupo de los primeros se encuentra el sector financiero(nacional e internacional) y sectores extractivistas (en particular los relacionados al sector energético y petróleo). Un episodio que sirve para ilustrar el modo de acumulación actual es el que tiene como protagonista el secretario de agricultura de la nación cuando aconsejó al sector agropecuario a vender soja y entrar en la bicicleta financiera. Otro de los grandes ganadores son las importadoras, cada vez hay más alimentos producidos en otros países en el país que puede producir alimentos para millones de personas.
Los elementos y variables explicadas hasta aquí son propios de un modo de acumulación de valorización financiera o modo rentístico financiero. Es por esto por lo que el Gobierno marca la agenda del debate público en torno a las variables financieras, dejando de lado todo lo que refiere a los niveles de empleo, poder adquisitivo de los ingresos, de la producción y redistribución de la riqueza. Por el contrario, las explicaciones ortodoxas de la economía establecen que es necesario un primer estadio de ajustes y sacrificios necesarios, aunque temporales, para que se generen las condiciones de crecimiento “genuinas”, o sea, que no tienen que ver con el intervencionismo estatal. Es decir, que, al retirar al Estado de la economía, las fuerzas del mercado actuarán libremente, traccionaran al resto de la economía y se generará el mejor escenario posible. En fin, no existe en el mundo casos en los cuales los países que hayan atravesado etapas de crecimiento y/o desarrollo económico no hayan contado con un activo rol del Estado.
El modo de acumulación actual prescinde de las mayorías. Es un país para unos pocos. A este tipo de modelo de país no le interesa establecer sectores productivos que generen valor agregado, incremento en los niveles de empleo y de los ingresos para los cuales el conocimiento es el motor. Es por esto por lo que las universidades públicas, instituciones de ciencia y técnica y el sistema educativo en su conjunto padecen un constante y violento ajuste. Es por esto por lo que los perdedores son la clase trabajadora de sectores registrados e informales, jubilados, estudiantes, cualquier persona que precise asistencia estatal.
A pesar de todo esto ¿cuál es el grado de consistencia de este esquema económico? Alcanza con ver la historia reciente de nuestro país para obtener la respuesta, como por ejemplo el Gobierno de la alianza Cambiemos que obtuvo el préstamo más grande de la historia de nuestro país y del F.M.I y terminó en una gran recesión y crisis externa profunda. Este esquema funciona con el ingreso de divisas financieras,a las cuales hay que darle cada vez más estímulos para que ingresen a la economía, y allí radica una de las inconsistencias ya que alcanza que una potencia, como Estados Unidos,incremente la tasa de interés (lo que es muy probable que suceda) para que los capitales que se encuentran en nuestro país se fuguen en masa. Es por esto por lo que la situación es muy precaria y delicada, pero parece que el Gobierno no la ve.
Por: Arnaldo Ludueña Investigador-docente del área de Economía Política de la Universidad Nacional de General Sarmiento | Twitter: @arnaldoluduena · @EconomiaPolUngs