Al cumplirse una semana de las marchas multitudinarias, disturbios, denuncias y represión por parte de las fuerzas militares, Chile hace historia aproximadamente 1 millón de personas se reúnen en Plaza Italia, en Santiago de Chile (ciudad capital). Al parecer los intentos del presidente Sebastián Piñera por detener las manifestaciones, con medidas económicas de último momento y un posible cambio de gabinete, no fueron suficientes ya que la población chilena sigue pidiendo por su renuncia.
Más de 1 millón de personas se reunieron, como ya habían prometido, este viernes 25/10 en la Plaza Italia, una de las más transitadas e importantes de Santiago de Chile (ciudad capital chilena), para pedir por la renuncia del presidente Sebastián Piñera. Después de una semana de disturbios, manifestaciones pacíficas y violentas, represiones y denuncias, chilenos de distintos estratos sociales se reunieron en un lugar icónico de su ciudad y hacerse escuchar, lo que queda reflejado en el hecho de que no existe un líder en las manifestaciones.
Desde la comunidad internacional las protestas de Chile fueron más que sorpresivas, sobre todo porque muchos políticos de otras regiones de América Latina siempre pusieron a las instituciones y gobierno chileno como un ejemplo. Sin embargo, cuando el presidente Piñera declaro el 'estado de emergencia' que solamente podría sostenerse por 15 días, es decir una semana más y de no levantarse antes tendrá que pasar al Congreso, el escenario chileno comenzó a ser el centro de atención de todos los países de la región y a nivel internacional.
Recordemos que las manifestaciones estallaron cuando los jóvenes comenzaron a protestar por el aumento de la tarifa del metro a fines de la semana pasada. Aunque claro ahora estas protestas ya no solo se refieren al metro, teniendo en cuenta que esto último fue la gota que rebalsó el vaso frente a una inestabilidad y desigualdad social alrededor del país. "Esto es algo que se gesta hace tiempo, con las pensiones, los sueldos, pero lo que hizo estallar fue cuando subió el metro y el presidente no quiso revertir esa decisión", dijo a Eduardo Feinmann en A24, el ex diputado chileno, Jorge Tarud Daccarett.
"Yo soy opositor a este gobierno , pero todos los políticos tenemos que aprender de esta situación", explicó el ex congresista en referencia a la iniciativa ciudadana que se auto convocó este viernes 25/10. Esto es uno de los detalles para tener en cuenta del origen y esencia de la situación chilena: no hay ningún tipo de dirigente, ni partido político, ni organización social al frente de las manifestaciones, es puramente una reacción de la ciudadanía que refleja las bases de la democracia.
En tanto, muchos se preguntan por las consecuencias de estas jornadas de manifestaciones y claro esta protesta histórica: ¿cuáles son las posibilidades de una renuncia por parte del presidente? ¿Y de un cambio de gabinete? De esto último ya se habló, aunque los chilenos todavía siguen esperando. De acuerdo con el ex diputado Tarud Daccarett, un cambio es necesario, "partiendo por el funcionario del Interior", dijo en A24 con respecto a la situación de Andrés Chadwick el actual Ministro del Interior que fue funcionario también durante la dictadura de Augusto Pinochett, quien estuvo en la boca de muchos esta semana debido a las represiones, desapariciones y denuncias de violaciones en manos de las Fuerzas Armadas.
Chadwick y su Ministerio comenzaron a ser investigados por la oposición por supuesta violación de Derechos Humanos; ya detuvieron a dos uniformados. Claro que el mismo también fue punto de críticas en las manifestaciones y en las redes sociales, mientras todos apuestan que será el primero en dejar el cargo en un posible cambio de gabinete, es decir una de las pocas cosas que podría salvar al gobierno de Piñera. Sin embargo, Chadwick fue quien tomó junto con Piñera la decisión de sacar a las Fuerzas Armadas a las calles y comenzar con un proceso de cruel represión, es así que algunos medios locales, como La Tercera, aseguran que Piñera está lejos de remover a uno de sus personas de confianza.
A esto llegó el rechazo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), quien condenó tanto el accionar violento por parte de las Fuerzas Armadas, como la violencia por parte de la población al destruir partes de la ciudad. “La Comisión urge al Estado chileno y a todas las partes involucradas a entablar un diálogo efectivo e inclusivo para abordar las demandas legítimas de la población, en el marco democrático del Estado de Derecho”, explicó en su declaración el organismo.
Posteriormente, este viernes 25/10, la ex presidenta chilena de doble mandato, Michelle Bachelet, y hoy nuevamente funcionaria de Naciones Unidas, a cargo de Derechos Humanos, anunció que investigará de la mano de la ONU la violación a los derechos humanos. La misma fue invitada por el mismo presidente Piñera para que la misma se informe de la "situación en terreno". Al día de hoy, según el reporte por hora, del Instituto Nacional de Derechos Humanos chileno, ya son 2948 las personas detenidas y 585 las heridas.