WASHINGTON. La lucha contra el cambio climático será beneficiosa para el crecimiento económico en todo el planeta, coincidieron varios líderes mundiales durante el cierre de la cumbre climática organizada por el gobierno de Estados Unidos.
El presidente Joe Biden encabezó la lista de personalidades que apoyaron los llamados a implementar mayores impuestos al carbono, y que tanto gobiernos como la iniciativa privada realicen inversiones masivas en energía verde para frenar las crecientes temperaturas y poner al mundo en camino hacia la prosperidad.
De esta manera, los líderes mundiales redoblaron sus compromisos internacionales y diseñaron un futuro en el que se generarán millones de empleos, muchos de ellos en sectores "aún no imaginados" como las "islas de energía" para frenar el calentamiento global.
"Habrá gente trabajando en campos que aún no hemos imaginado en granjas y fábricas, en laboratorios y universidades", subrayó Biden en su intervención al destacar la "oportunidad" que se abre para crear "millones de empleos bien pagados" en todo el mundo.
A su vez, Bill Gates, cofundador de Microsoft, advirtió que las tecnologías que "se usan hoy no permitirán alcanzar los ambiciosos objetivos" de reducción de los gases de efecto invernadero por lo que será necesaria una "enorme inversión conjunta" tanto del sector público y privado.
"No habrá un político, da igual lo demagogo o capaz que sea, que vaya a cambiar el modo en que los mercados se están moviendo" hacia una economía sostenible y verde, reconoció John Kerry, enviado especial del clima del presidente Biden, anfitrión de la conferencia.
El Gobierno de EU presentó a funcionarios de alto rango del gabinete ya líderes empresariales para defender el papel de la tecnología en una "economía neta en cero (emisiones) y resistente al clima".
El mandatario estadounidense ha tratado de relacionar los esfuerzos de lucha contra el cambio climático con las oportunidades de creación de empleo, no solo en el país, sino a nivel mundial, argumentando que la adopción de medidas será buena para la economía con el fin de contrarrestar las preocupaciones de los republicanos de que la regulación del clima podría perjudicar el crecimiento y el empleo.
Por su parte, la secretaria de Energía de Estados Unidos, mencionó que la tecnología limpia es "el viaje a la Luna de nuestra generación", durante el segundo y el último día de la cumbre internacional sobre el cambio climático.
"Este es el lanzamiento a la Luna de nuestra generación", dijo Jennifer Granholm, la secretaria de Energía sobre las oportunidades de empleo e inversión en tecnologías limpias como la captura y el almacenamiento de carbono, los paneles solares y los vehículos eléctricos.
Respecto al aumento de impuestos al carbono, el gravámen estará dirigido a las mayores fuentes de emisión debería tener como objetivo cambiar el comportamiento del consumidor animándole a menos energía, comprar vehículos electrónicos y usar productos domésticos más eficientes.
El Fondo Monetario Internacional afirmó que un impuesto de ese tipo es la única forma de mantener el incremento de la temperatura del planeta dentro de los 1.5 grados Celsius por encima de la época preindustrial.
Su titular, Kristalina Georgieva propuso un precio mínimo de carbono para los mayores emisores que cubrirá hasta un 80 por ciento de las emisiones globales, pero "con precios diferenciados para países con diferentes niveles de desarrollo económico".
El presidente demócrata, que devolvió a Estados Unidos al pacto, se comprometió a reducir sus emisiones entre un 50 por ciento y un 52 por ciento para 2030, en comparación con los niveles de 2005.
La Casa Blanca trata de asegurar a otros países que pueden cumplir ese objetivo, incluso si un nuevo gobierno asume el poder, porque la industria está avanzando hacia una energía más limpia.